<p style="text-align:justify;">Las destilerías más famosas se pelean por las botas envinadas con vinos de Jerez para darles a sus productos un toque de distinción durante el proceso de envejecimiento.</p>
<p style="text-align:justify;">Sánchez Romate ha querido abducir la materia prima con la que se elabora el whisky escocés y redondearla en la tierra de origen de estas botas. Es un whisky con alma escocesa de estilo jerezano. Según el consejero delegado de Sánchez Romate “nos traemos la holanda, lo que denominan en Escocia ‘new make malt spirit’, que se hace whisky en Jerez después de tres años de envejecimiento en ‘Sherry Casks”.</p>
<p style="text-align:justify;">La crianza de este singular whisky de malta es de siete años, el tiempo justo para que el jerez no acabe tapando al whisky. Sus características vienen determinadas por su envejecimiento en botas de oloroso, amontillado y Pedro Ximénez, tras el que se realiza una mezcla o blend a partes iguales (un tercio de cada bota) para su embotellado.</p>
<p style="text-align:justify;">Según la bodega, es “un whisky fuera de lo común con un toque especiado y un final elegante, digno de los más distinguidos paladares” y del que realizan una saca anual –la primera se realizó en septiembre–, con una producción limitada de 715 botellas.</p>
Precio
32,95 €